A veces nos puede apetecer viajar a tierras paradisiacas y emprendemos larguísimos viajes en avión para cruzar océanos y encontrarnos en resorts donde el personal está entrenado para ser capaz de cumplir todos nuestros caprichos. Sin embargo, si estás pensando en pasar unas vacaciones en algún rincón privilegiado del planeta, tal vez no te haga falta irte a la otra punta del globo. En el mismo mar Mediterráneo te espera la isla de Chipre, donde encontrarás playas de ensueño, ocio para todos los gustos, un patrimonio histórico espectacular, y todo ello a unos precios asequibles marcados en euros.
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EL PARAÍSO MEDITERRÁNEO DE CHIPRE
LAS PLAYAS CHIPRIOTAS
El principal complejo turístico playero en Chipre se encuentra en Aya Napa, cerca de la ciudad de Lárnaca. Toda actividad que desees hacer relacionada con el mar y los deportes náuticos, aquí tienes oportunidad de disfrutarla. Otra zona playera es Pafos, donde además puedes visitar uno de los grandes monumentos de Chipre, la Tumba de los Reyes de Pafos. Aunque si buscas otras playas menos populosas, entonces debes ir a la costa oriental, al Península de Akama, donde todo es mucho más natural y te dará la impresión de ser su descubridor, sobre todo en las calas salvajes de Polis. Además en esta zona puedes combinar las horas de toalla y baños en el mar, con la práctica del senderismo por el entorno.
EL MONTE OLIMPO
Pero si lo tuyo son las caminatas, entonces los 2.000 metros de altura del Monte Olimpo te atraerán como un imán. Desde su cima dispondrás de las mejores vistas del país. Y habrás recorrido unos senderos repletos de bosques de vegetación mediterránea donde habitan innumerables especies animales. Y es que el turismo natural es uno de los motivos para pasar unas vacaciones en Chipre. Sorprende ver como el litoral costero queda prácticamente a un paso de las sierras interiores, de manera que en una misma jornada, te puedes bañar en el mar, tener la suerte de ver alguna tortuga, caminar entre dunas y luego adentrarte en bosques donde cazan los zorros.
LAS CIUDADES DE CHIPRE
Pero no todo es playa y naturaleza, en Chipre te puedes desplazar de ciudad en ciudad para descubrir la historia del lugar. Una isla que ha sido un cruce de culturas entre oriente y occidente desde antiguo, entre Europa, Asia y África, por ello su patrimonio es de lo más variado. Lárnaca, Limassol o Nicosia ofrecen paseos entre mezquitas, iglesias anglicanas, católicas u ortodoxas, fortalezas, castillos y palacios. Sin olvidar su yacimientos arqueológicos, algunos de ellos excelentemente conservados. Seguro que te faltan días durante tus vacaciones para verlo todo. Por eso tendrás que elegir. Aquí van algunas ideas. El Acueducto de Kamares financiado por el pachá en 1746. La Mezquita de Alá Sultán en las cercanías del Lago Salado. Las iglesias de la región de Troodos con sus pinturas murales. O el Castillo de Kolossi son solo algunos lugares de una lista interminable de atractivos con los que no acabarás.
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