El Mercado del Born, junto a la Basílica de Santa María del Mar, son los dos grandes referentes para los visitantes que acuden al céntrico e histórico barrio de La Ribera, en las proximidades del Barri Gòtic.
El Passeig del Born
Esta vía es la arteria principal de esta zona de la ciudad. Es un paseo de planta alargada, una forma que nos habla de su pasado, cuando precisamente aquí se celebran torneos medievales entre caballeros. De hecho, el nombre del paseo y también del mercado, Born, viene de la palabra catalana bornar, que no significa otra cosa que lidiar.
Y se sabe que aquí se celebraban esos torneos, y también que se nombró a nuevos caballeros hasta el siglo XVII, que antes de esa ceremonia pasaban la noche orando en la cercana Santa María del Mar.
Pero este paseo también ha sido usado para ferias, procesiones y celebraciones varias. Por ello fue uno de los lugares predilectos para que las clases más pudientes levantaran aquí sus casonas y palacios. Todo para darle un aspecto señorial, que ahora es ideal para pasar por aquí la noche en los muchos bares y pubs de la zona.
El Mercado del Born
En el extremo este de todo este paseo se levanta el célebre Mercado del Born. Una obra del siglo XIX proyectada por el ingeniero Josep Maria Cornet i Mas. Fue una construcción muy de su tiempo, realizada a partir de una espectacular estructura metálica. De hecho, la construcción merece ya de por sí una visita, para apreciar sus dos naves principales y las cuatro laterales, que en el centro se cubren con formas de cúpula. Todo el espacio queda bañado por la luz natural que entra por su tejado de vidrio.
Pero no todo es estructural, también quiénes lo construyeron tuvieron en cuenta darle su ornamentación, algo que se aprecia en numerosos detalles de la forja.
El Mercado del Born en la actualidad
Su función como espacio para el comercio se perdió hace ya tiempo. Y ahora este edificio sirve como sede para diversas dependencias de la Universitat Pompeu i Fabra. Además con motivo de la recuperación del edificio para su nuevo uso, salió a la luz la riqueza arqueológica que estaba oculta en su subsuelo. Un conjunto histórico cuyos vestigios se han investigado y se han puesto en valor para mostrar los restos de esta zona de la Barcelona del siglo XVIII.